Han pasado miles de años desde que estuve aquí por última vez, pero quiero terminar de contar esta historia e histeria de mi vida, por lo que representó en la misma.
Como dije antes, al retomar mi relación con D, se me hizo fácil batear al Doctor, siempre contestaba a sus mensajes de manera indiferente y cortante; pronto él dejó de insistir.
Poco tiempo después vino mi rompimiento definitivo con D, fueron meses difíciles en los que me sentí tan mal, tan deprimida, descuidé mi aspecto, lloraba, no podía dormir, mostraba inapetencia de todo tipo, parecía pérdida. Mientras tanto, mis amigas trataban a toda costa de sacarme de la depresión (con muy poco éxito, valga decir).
A finales del año 2008, como cada año mis amigas y yo organizamos una cena pre navideña, para cerrar ciclos, hacer propósitos y sobretodo comer y embriagarnos, esa ocasión decidimos invitar a nuestro amigo Gg (quien nos presentó al Doctor en la boda en la playa), él felizmente aceptó la invitación.
Esa noche empecé a beber, me envalentoné y le mandé un mensaje a D, preguntando ¿Aún me quieres? Él no contestó y me puse a llorar. De pronto alcé la mirada, vi entrar a mi amigo Gg y detrás de él al Doctor Apuesto, me quedé fría y me dio vergüenza por lo grosera que había sido con él.
El doctor al verme esbozó una sonrisa, me saludó cordialmente y me dijo ¿Pero qué le hicieron? Le contesté que me habían roto el corazón, el me abrazó y respondió "no se preocupe yo la voy a cuidar"...
viernes, 6 de enero de 2017
El Doctor Apuesto parte III
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