Sí, en un primer momento me negué a darle mi número de teléfono a ese extraño Doctor que en mi primera impresión parecía pedante y altanero, solo por ser Médico, pero al contrario de lo que creí, era bastante agradable y sobre todas las cosas realmente muy guapo... Él insistió ante mi negativa y no me quedó más remedio que ceder ante esos ojos suplicantes de niño bueno y no hubo más remedio que darle mi número de celular. Él prometió llamar al día siguiente para "ver si hacíamos algo". Lo único que hice fue asentir con una sonrisa y despedirme cortésmente.
Al día siguiente, Él no llamó y tampoco al siguiente del siguiente...
Un mensaje suyo llegó hasta un mes después, justo cuando a mi se me había olvidado lo lindo que era y solamente quedaba una imagen rara de un tipo que coqueteo conmigo en una fiesta y el cual no me interesaba en absoluto porque mi relación con D estaba otra vez bien encaminada y me sentía feliz con él... Así que fue fácil batearlo y mostrar claramente mi falta de interés en Él.
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miércoles, 29 de febrero de 2012
martes, 25 de octubre de 2011
El Dr. Apuesto, Parte I
Como dice la canción "Lo nuestro solo fue casualidad, la misma hora y..." La misma boda en un pequeño pueblo, cercano al puerto donde él vive. Nos conocimos gracias a su mejor amigo (que también es mi amigo) y a mi mejor amiga, ninguno se imaginó lo que sucedería después de ese breve encuentro.
Cuando lo vi entrar por la puerta del salón, no pude evitar pensar que ese hombre era increíblemente apuesto, además de tener una gran seguridad y su altivez al caminar, mi sorpresa fue mayúscula al ver que llegó acompañado de mi amigo, quien lo presentó como "Su hermano", el se sentó frente a mi, nuestras miradas se cruzaron al menos media docena de veces, no podía dejar de mirarlo, era tan atractivo a mis ojos, por fin se decidió y me invitó a bailar. Lo primero que dijo fue "Hola pequeña", ante mi mirada desdeñosa y mis 1.71 m de altura, corrigió y dijo "Bueno, pequeña creo que ni de los ojos"
Mientras el sujetaba mi cintura y nos movíamos al compás de la música, me enteré de que el no es hermano de mi amigo, pero que así lo sentía y me enteré de que es médico, ahí su atractivo se fue a la basura ya que en mi cabecita, los médicos son "unossoberbiosegocentricosengreidosconcomplejodesemidios". Regresamos a la mesa, el tenía que marcharse, no sin antes solicitarme cortésmente mi numero telefónico el cual le negué, por su puesto...
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miércoles, 8 de diciembre de 2010
Y sí amanece por fín...
Realmente creí, que cuando dije que era el fin, solo era el fín de esta historía, pero resulta que no, que no es el fín, que sólo no se qué es.... Espero que mis queridos tres lectores me ayuden a entender, eso que no entiendo, eso que no sé
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sábado, 23 de octubre de 2010
Ahí viene el Doctor Apuesto
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